Cuando hablamos de piel, nos viene a la mente dos cosas, calidad y antigüedad. Y no sin razón, el curtido de pieles es uno de los oficios más antiguos de la humanidad. Su origen se remonta hasta los primeros antepasados prehistóricos. En aquella época, las pieles de los mamíferos se utilizaban para protegerse de las bajas temperaturas. La piel sin ningún tratamiento no dura mucho en buen estado, se pudre con rapidez, una vez comienza este proceso la piel desprende malos olores y fácilmente podía causar infecciones y enfermedades. Si añadimos que por entonces no había ninguna higiene ni existían los jabones, una combinación que era prácticamente mortal. 

Así pues, surge la imperiosa necesidad de detener el proceso natural de la putrefacción. Los primeros comienzos fueron con el humo del hogar, un rudimentario pero satisfactorio proceso que lograba conservar el cuero y aumentar su resistencia de los agentes externos. 

Un avance más en este proceso, fue el curtido vegetal, un proceso bastante más elaborado. Las pieles se sumergían en aguas con sustancias naturales que procedían de árboles caídos en el agua. Estas sustancias permitían la conservación y curtición de la piel, además de eliminar la suciedad. 

Los procesos de curtido en la actualidad 

 

Hoy en día los procesos de curtido están mucho más avanzados, pero sí tuviéramos que resumirlos en unas etapas, éstas serían: RIBERA, PIQUELADO, CURTIDO, POST-CURTICIÓN, SECADO Y TERMINACIÓN.

Ribera hace referencia al proceso de preparación del curtido, que incluye remojo, el descarnado y la eliminación de pelo, después se estabiliza químicamente (Piquelado), con ácido sulfúrico y fórmico.

Y por fin llegamos a la etapa de curtido, para simplificarlo un poco, se trata de un proceso por el cual se estabiliza el colágeno de la piel mediante agentes curtientes minerales o vegetales, transformándola en cuero, este proceso es el último en húmedo. Después de éste se obtiene la piel que se denomina Wet Blue, en la cual ya se puede determinar su calidad según su calidad y grosor.

Por último, queda el proceso de post-curtición, secado y terminación, que ya explicaremos en otro post más detalladamente.

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